Parecen ser términos antónimos emprender y crear respecto a universidad y España.
En este clima político-económico que estamos atravesando es difícil creer en un paradigma de universidad española emprendedora, yo personalmente creo que es el futuro y si no se establecen los ingredientes necesarios para que ello tenga lugar estaremos condenados a la mediocridad que día a día nos ata de pies y manos o nos invita a alejarnos de nuestro país en búsqueda de El Dorado.
No quiero entrar a valorar la desproporcionada subida de tasas de las universidades públicas ni los recortes en investigación, así como los presupuestos con los que se cuenta, no, sólo quiero dar mi punto de vista para un cambio que podemos lograr cada uno en su punto y medida.
A diario leemos noticias y artículos sobre nuevos compuestos, inventos y descubrimientos fruto de la investigación de estudiantes / investigadores de las mejores universidades del mundo. ¿Por qué no en España? ¿La crisis?
Citando a Einstein: “La crisis es la mejor bendición que puede sucederle a personas y países porque la crisis trae progresos”.
El ejemplo perfecto del tipo de universidad que debería ser la española en su cómputo es Stanford o MIT. Se trata de buscar patrones que han funcionado en las mejores universidades del mundo y extrapolarlos adaptándolos a nuestras universidades.
Por ejemplo, Stanford pasó de ser una inhóspita zona de granjas en Palo Alto en 1870 a convertirse en una de las mejores universidades donde existe un ecosistema increíble para que los estudiantes puedan y tengan acceso a crear; la historia de Google comenzó en un dormitorio de estudiantes de la universidad, también la de Hewlett-Packard, Yahoo o Sun Microsystems.
Este año Stanford ha ofrecido cursos online en abierto (y gratuitos) para que cualquier persona pueda realizar cursos en diversos ámbitos, ha tenido gran acogida por la programación y forma de llevarse a cabo. Esta forma de estudio fue pionera del MIT hace 10 años con OpenCourseWare (OCW) habiendo alcanzado más de 2000 cursos impartidos.
Por su parte MIT tiene diversos grupos de estudiantes que participan en muchas competiciones y experimentan con el fin de aprender, así como iniciativas focalizadas en la investigación del cáncer, energía etc.
El ecosistema que se ha formado en estas universidades es el que las universidades españolas tienen que conseguir crear.
Falta financiación, es cierto, pero muchas de las iniciativas se pueden realizar con pocos recursos simplemente con un poco de esfuerzo por parte de las universidades y un empuje considerable de los estudiantes y apoyo de profesores. Los estudiantes somos la base de la pirámide, la universidad nos necesita y nosotros la necesitamos a ella para ser mejores profesionales en el futuro. La mejor manera de llegar a ser un gran profesional se consigue teniendo mayores capacidades para enfrentar problemas, haber vivido experiencias que no se aprenden en los libros, construir ideas con otros estudiantes, dar solución a problemas que se crean…
Este año he participado en un proyecto universitario, crear un robot submarino inteligente para competir con algunas de las mejores universidades del mundo. Nos hemos encontrado con millones de dificultades pero no lo hemos dejado de lado por falta de financiación, en estos momentos están algunos de mis compañeros en EEUU en la competición, otros no hemos podido ir por falta de dinero, pero lo importante es todo lo que hemos aprendido estos meses. Queremos que la asociación que se ha formado FuVe (Future Vehicles and Entrepreneurs) sea el medio idóneo para que diferentes estudiantes con inquietudes puedan construir proyectos para participar en todo tipo de competiciones, votamos por el cambio.
Por ello todos los entes que forman parte del sistema educativo tienen que poner de su parte para que podamos lograr tener un país de jóvenes competitivos.
Desde las universidades cada vez nacen más iniciativas como ActúaUPM en la Universidad Politécnica de Madrid donde alumnos e investigadores pueden presentar ideas de negocio para luego intentar llevarlas a cabo y crear la empresa finalmente; cito ActúaUPM por conocerla y haber participado, pero existen competiciones similares en otras universidades españolas.
Además, los profesores y la propia universidad creo que necesitan un cambio de mentalidad, animando a los estudiantes a involucrarse en nuevas ideas, también proponiendo y haciendo un sistema educativo más interactivo y abierto, o al menos que ayuden a los que sí quieren crear algo no poniendo trabas para no tener que sacrificar la carrera universitaria.
Existen pocos profesores con esta filosofía pero yo tengo confianza en que ellos si pueden cambiar el entorno universitario desde dentro.
No es el mejor momento para muchas cosas, pero siempre es buen momento para cambiar un poco España, y crear un ecosistema de innovación y creatividad, sólo hay que querer.
También podéis leer mi publicación en : http://www.optimismodigital.com/emprendimiento/emprender-y-crear-en-universidades-espanolas/